FUENTES DE CAROTENOIDES
Carotenos.
Se encuentran en alimentos como la zanahoria, calabaza, papaya, mango, sandía, pimientos verdes, manzanas, melocotones, patatas y vegetales de hojas verdes.
El alfa, beta y gama caroteno protegen las membranas de nuestras células e intervienen en las funciones relacionadas con la salud de los ojos, de la piel y de las mucosas. Además, fortalecen el sistema inmunológico y ayudan a prevenir las enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer.
Licopeno.
Se encuentra de forma natural y en grandes cantidades en el tomate, la sandía y las guayabas rosadas. Se le atribuyen acciones beneficiosas como ayudar a prevenir varios tipos de cáncer, ayudar a proteger la memoria, proteger contra la degeneración macular y ayudar a las personas de edad avanzada a mantenerse activas.
Luteína.
Se encuentra en alimentos como la calabaza, espinaca, pimiento rojo, yema de huevo, aguacate, apio y perejil. En menor concentración se encuentra en el brécol, guisantes verdes y maíz. Protege la vista (absorbe los rayos ultravioletas del sol evitando que estos hagan daño a la retina). Esto ayuda a prevenir problemas como la degeneración macular (enfermedad en la que la parte central de la retina conocida como la mácula se deteriora causando pérdida parcial o total de la visión.). Algunos estudios apuntan a que puede ayudar a prevenir la aparición de cataratas y proteger de los ataques cardiacos y las apoplejías o derrames cerebrales.
Zeaxantina.
Se encuentra en alimentos como la espinaca y otros vegetales de hojas verdes oscuras, en los huevos y en las frutas cítricas. Contribuye a proteger la visión, ayuda a proteger la retina de los daños causados por los rayos solares y también protege las sustancias grasas en el interior de los ojos de los daños causados por los radicales libres.